Los Pre(supuestos) Generales del Estado esos

Entre las muchas cosas incomprensibles que el currito de a pie tiene que tragarse anualmente son la peleas de los politicastros sobre los Pre(supuestos) Generales del Estado (lo del paréntesis es una gracieta sin más recorrido) , siempre están a la gresca con ellos, que sin son poco sociales, que si no están adaptados a la realidad del momento, que si están por debajo de las expectativas del ciudadano (¿qué ciudadano?) que si no se cuantas cosas terribles más que llevarán al país a la ruina y la miseria.

De todas las discusiones que se mantienen en el ámbito político, esta debe ser la peor llevada de todas, aquí la clase política demuestra toda la amplitud de su desinterés por esos ciudadanos que dice defender, se dedican a llenar con adjetivos un objeto informe y con eso se creen que han cumplido. Pues no, en lo que a mi respecta lo único que hacen es decir gilipolleces, dejando de lado un papel (aunque hablando de papel, creo que lo que hacen no es precisamente dejarlo de lado) fundamental: el didáctico.

Que la oposición diga que son malísimos para las familias españolas y que su contraparte diga que son los mejores que se pueden hacer al día de hoy me la trae al pairo, quiero que me digan porqué son tan buenos o tan malos, que hagan un esfuerzo de síntesis y expliquen como están repartidos, porqué, como se van a cubrir y porque los adjetivan como los adjetivan.

El resto es verborrea estúpida y tan vacía como Madrid en agosto.